El Cambio Climático no es una amenaza, es una realidad lamentable. Los últimos meses venimos asistiendo a lo largo y ancho del país, a huaicos, inundaciones, lluvias que ponen en evidencia los cambios de la naturaleza, pero sobretodo nuestra incapacidad como sociedad y como gobierno para hacerles frente.
Tenemos situaciones inéditas es cierto. Nadie esperaba la magnitud de las lluvias y las alteraciones climatológicas, sin embargo, su afectación da cuenta de otro problema: La ausencia de políticas y planes de prevención, el mal manejo de los recursos, entidades, en definitiva, del territorio.
En estos casos, como suele repetirse, los más afectados son los sectores más pobres y en particular los pobres del campo, las pequeñas unidades de familias agricultoras. Ellos los que proveen del 70 % del alimento de los peruanos. Los otros afectados, somos las grandes mayorías de las ciudades, que vemos que el alimento escasea y sube de precio, por la especulación de algunos comerciantes y la inacción de las autoridades.
Casi en todos los departamentos de la costa los pequeños productores han perdido sus cultivos o sus productos no pueden salir por el cierre de las vías por los huaycos. Ante este panorama, la enfermedad y la muerte nuevamente se apoderan del campo. Urge la ayuda y solidaridad de todos con nuestros hermanos del campo.
Hay que reconocer acciones que vienen llevando las autoridades, los gobiernos locales, los ministerios, la solidaridad y apoyo de diferentes actores de la sociedad; sin embargo, esto es limitado y a veces lamentablemente no llega a los más afectados, se pierde en el camino, en la burocracia, la ineficiencia y en la corrupción, desde siempre uno de los lastres más grandes que afecta a nuestro país.
Las últimas informaciones de Instituto de Defensa Civil son alarmantes: decenas de muertos y cientos de miles de damnificados. En las noticias lo que se visibiliza es el impacto de la naturaleza sobre todo en las áreas urbanas, pero no en el campo, donde no hay una información certera acerca de su verdadero alcance. En el campo sabemos de la perdida de grandes cultivos de arroz, del banano orgánico en Piura, pero no tenemos información de lo que acontece con los pequeños productores, de sus chacras, sus animalitos, sus parcelas, etc.
En ANPE – Perú nuestros propios socios nos informan que los municipios más afectados son los siguientes:
• PIURA: La Arena, Cura Mori, La Unión, Sechura, Bella Vista, Tambo Grande, Callejones, Chulucanas, la Matanza, Morropón, Buenos Aires, Salitral, Bigote, Querecotillo, Sullana, Catacaos, Paita, Colan.
• LA LIBERTAD: Laredo, Moche, Cupe, Simbal, Poroto, Otuzco, Julcan, Huamachuco.
• LAMBAYEQUE: Morrope, Túcume, Illímo, Salas, Pácora, Jayanca.
• LIMA: Santa Eulalia, San Antonio de Chaclla, Cumpe, Huachupampa, San Mateo de Otao, San Pedro de Casta, Marcahuasi, Callahuanca, Coyata, Huachuya, Puente verde, Carapongo, Rio Chillón, km 41 fondo ecológico ECOSAN.
La situación es bastante crítica, demanda acciones urgentes. ANPE- Perú junto con más de treinta organizaciones de la sociedad civil vinculadas al campo, nos hemos reunido para conformar un Comité de Ayuda Multisectorial a los afectados de las zonas rurales. En esta reunión se plantearon novedosos e importantes acuerdos para poder instalarlos de forma colectiva.
1. Apoyar con alimentación, medicinas linternas, pilas, plásticos carpas, medicinas, mangueras en algunos lugares hay plantación, pero no tienen agua por lo momento para regar su plantación necesitan mangueras, herramientas.
2. Desarrollar un catastro de afectados. Esto nos permitirá contar con información de mejor calidad acerca de la afectación real en el campo, sobre todo en los lugares donde no hay acceso de carreteras.
3. Conformación de comités locales de emergencia, para la movilización y el trabajo de incidencia.
4. Desarrollar para mediano plazo un plan de rehabilitación y reconstrucción del Agro. Con infraestructuras agrícolas, maquinarias, insumos, semillas, herramientas.
Paralelamente, desde ANPE-Perú, se abierto una cuenta corriente de Banco Continental en moneda soles 011-0147-0100028603-67 para aquellas personas que quieran solidarizarse con los afectados de ANPE Perú. A nombre del Consejo Directivo Nacional, agradecemos vuestra solidaridad y ayuda humanitaria.