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Del 15 al 22 de abril, dio inicio la caravana agroecológica hacia Perú. En el primer día, los participantes de Brasil, Ecuador y Perú fueron recibidos en una cálida ceremonia organizada por la Municipalidad Distrital de Campo Verde. El alcalde Donato Fernández dio la bienvenida, resaltando la importancia del encuentro para el futuro de la agricultura sostenible. Los representantes de cada país también expresaron su gratitud y destacaron la necesidad urgente de comprometerse con la implementación de prácticas agroecológicas.

La jornada continuó con una exhibición de productos locales que incluyeron jaca, camu camu, cacao, pitahaya, copoazú, café, miel y licores. Más tarde, visitamos la Asociación de Productores Ecológicos “El Pimental», un referente de agroindustria rural ubicada en el corazón del distrito de Campo Verde, provincia de Coronel Portillo, región Ucayali. Con una experiencia que abarca más de 12 años, son custodios de 16 variedades de ajíes amazónicos, agregando valor a 6 de ellas, como el Ají Charapita, Ají Charapita Rojo, Ají Pucunucho, Pinchito de Mono, entre otros, libres de agroquímicos. Además, sus socios y socias son conservacionistas y practican la agricultura regenerativa.

Durante la travesía hacia Perú, tuvimos la oportunidad de visitar a Valentin Mamani, de APECAB, una experiencia de agroindustria y gestión forestal. Este encuentro nos brindó la oportunidad de conocer prácticas ejemplares como la cosecha de agua, la forestación y la transformación de la caña de azúcar. Asimismo, exploramos la iniciativa agroforestal en Fundo Nicol – de Esaú Hidalgo, donde la biodiversidad es el eje central. Sin duda, estas experiencias han enriquecido nuestro conocimiento y fortalecido nuestro compromiso con la promoción de prácticas agrícolas sostenibles.

El primer día de la caravana culminó con la visita a dos experiencias de comercialización: La tienda Mishky Shobo-MPCP, donde se ofrecen productos agroindustriales regionales como chocolate, café, miel, panela, yogures, así como artesanía regional, entre otros; y Pruébalo, una organización que tiene como finalidad promocionar modelos de negocio especializados en biocomercio, con enfoque circular.

En el segundo día de la caravana agroecológica al Perú, se llevó a cabo una visita a la Finca de Darío Carlos Velasquez, destacada por su enfoque en la agroecología y su especialización en cultivos en zonas inundables, con énfasis en el camu camu. Posteriormente, los participantes de Brasil, Ecuador y Perú tuvieron la oportunidad de visitar la «Casa Artesanal Soi Kene», un espacio que alberga más de 30 stands donde las madres artesanas de la comunidad indígena San Francisco de Yarinacocha exhiben sus creaciones. En estos stands se pueden admirar una variedad de productos, que incluyen bisutería, tejidos, bordados, cerámicas, prendas de vestir con diseños inspirados en el arte Shipibo, cestería, entre otros.

En el tercer día de la caravana agroecológica al Perú, los participantes provenientes de Brasil, Ecuador y Perú se encuentran en Tingo María, donde se embarcaron en una caminata por el bosque reservado de la UNAS – Universidad Nacional Agraria de la Selva. Este bosque, custodiado y protegido por la universidad, representa un invaluable tesoro de biodiversidad amazónica. En él, se preservan especies endémicas de flora y fauna, así como ecosistemas únicos que son fundamentales para la investigación científica, la conservación ambiental y el ecoturismo responsable. La UNAS, a través de su bosque reservado, fomenta la educación ambiental y promueve la importancia de la conservación de los recursos naturales entre sus estudiantes y la comunidad en general.

En el cuarto día de la caravana agroecológica al Perú, se realizó una visita a la experiencia del Centro de Investigación y Producción Tulumayo de la UNAS – Universidad Nacional Agraria de la Selva. La visita estuvo guiada y explicada por el Dr. Ronald Puerta Tuesta, especialista en manejo de bosques y geociencias. Durante la visita, se pudo apreciar un ejemplo destacado de manejo sostenible en las plantaciones de aguaje, bolaina y capirona. Más tarde, nos reunimos con Walter Hidalgo en el Centro Ecoturístico Villa Hidalgo, donde se dedica a la cría y comercialización del paiche, una actividad que ha sido crucial para el sustento de su familia. A pesar de las adversidades, Walter ha logrado criar con éxito este pez amazónico a una altitud de 650 metros sobre el nivel del mar, superando todas las expectativas.

Al día siguiente, los participantes de Perú, Brasil y Ecuador, estuvieron presentes en la Ecoferia Amarilis Huánuco, un espacio donde se fomenta el consumo de productos agroecológicos y la promoción de una alimentación saludable y sostenible. Más tarde, se visitó la experiencia de la Asociación Regional de Consumidores Ecológicos de Huánuco, donde también se comercializa alimentos agroecológicos, libres de pesticidas. En una breve ceremonia, cada uno de los representantes de cada país dio sus palabras de agradecimiento y resaltó la importancia de contar con estos espacios que permitan el contacto directo productor/consumidor.

El último día de la Caravana agroecológica al Perú, conocimos el Fundo ecológico Bioagricultura Casa Blanca, un espacio dedicado a la producción, investigación y formación en agricultura ecológica, agroecoturismo y educación ambiental. Dirigido por Ulises Moreno y Carmen Felipe-Morales, aplican principios y prácticas agroecológicas basadas en el conocimiento tradicional, empírico y científico, sin recurrir a pesticidas, cultivando alimentos nutritivos y saludables. La finca produce su propia energía a través de un modelo chino de biodigestor, además de producir abonos orgánicos, como Compost y Biol.

Después de la visita, los participantes de Brasil, Ecuador y Perú compartieron sus primeras impresiones sobre las experiencias agroecológicas en Pucallpa, Tingo María, Huánuco y Lima, reflexionaron sobre lo que vieron y ofrecieron recomendaciones para mejorar. En este encuentro, expresaron su agradecimiento por la cálida acogida y comentaron cómo se sienten fortalecidos al conocer a más personas dedicadas a la agricultura agroecológica y a la promoción de una alimentación saludable y accesible para todos. Finalmente, se entregaron obsequios a los principales representantes de cada país.

De esta manera, las experiencias compartidas han demostrado que es posible cultivar la tierra de manera sostenible, promoviendo la biodiversidad y cuidando nuestros recursos naturales.Cada semilla sembrada, cada alimento producido y consumido representa una oportunidad para elegir un camino de armonía con la naturaleza.

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