Plan Nacional de la Plataforma Nacional de Reconstrucción de Agricultura Familiar Sostenible

Las instituciones de la Sociedad Civil Organizada, hemos visto la necesidad de conformar una Comisión Nacional de Emergencia y Reconstrucción del Agro Peruano integrada por: la Asociación Nacional de Productores Ecológicos del Perú (ANPE PERU), la Confederación Nacional Agraria (CNA), la Federación Nacional de Mujeres Campesinas (FEMUCARINAP), el Consorcio Agroecológico Peruano, la Asociación Peruana de Consumidores y Usuarios, (ASPEC), la Asociación Peruana de Gastronomía (APEGA), DIACONIA, FOVIDA IDMA, Centro Ideas, RAE Perú, OPENSTREEPMAP, ACUADEP, Central de Cooperativas de Desarrollo Rural - CIDERURAL, AGRONOTICIAS, LEISA, YPARD, REMURPE, CEPES, Fórum Solidaridad Perú y GRESP.

Esta alianza representa a miles de familias dedicadas a la agricultura, ganadería, apicultores, campesinos y campesinas, que se encuentran en una compleja situación de emergencia por los desastres, a consecuencia del Fenómeno del “Niño Costero” cuya ocurrencia, debido a precipitaciones pluviales fueron ocurriendo con mayor intensidad desde enero, prologándose hasta abril.  

El Cambio Climático es un factor que agrava la precaria situación del agro y la alimentación en la costa del Perú. El proceso de recuperación post desastre de las regiones afectadas se viene implementando progresivamente, donde confluyen aportes de un conjunto de actores involucrados; del Estado, de la cooperación internacional, de organizaciones de sociedad civil y de la solidaridad de la población que es canalizada mediante las campañas de recolección en diferentes lugares del país. Sin embargo, debido a la extensión de los daños y necesidades y la limitada logística, hay muchas familias en diversos centros poblados y albergues que no reciben lo necesario para subsistir en condiciones básicas. A esto se suma las limitaciones de accesibilidad, ahora la presencia de enfermedades como dengue, cobrando pérdidas de vidas humanas

Para enfrentar estos problemas se requiere que el Estado Peruano asuma una perspectiva de desarrollo sustentable integral y territorial, brindando mayor apoyo a la agricultura familiar conformada por miles agricultores, campesinos y campesinas  que han perdido sus predios, domicilios, y vidas humanas; elevando la inversión pública, diseñando estrategias de adaptación al cambio climático, reconociendo la capacidad de resiliencia de los sistemas de producción agroecológica, incentivando programas de capacitación, formación y asistencia técnica a los productores y  desarrollando del mercado interno.

Hemos sido testigos del crecimiento económico de los últimos 10 años, pero también hemos visto cómo este crecimiento no ha ido acompañado de las reformas necesarias para que sus beneficios lleguen a los pobres del campo. Como resultado, persiste la desigualdad, la falta de integración y cohesión económica y social que se expresa en múltiples dimensiones.

Nuestras metas estratégicas del Plan Nacional de Emergencia y la Reconstrucción, deben considerar,  mejorar los obstáculos que los agricultores familiares enfrentan para aumentar su capacidad de resiliencia ecológica productiva y económica. Nos interesa promover experiencias exitosas en agricultura ecológica, provisión de herramientas necesarias a los agricultores familiares para que puedan incrementar su productividad e ingresos y articularse a cadenas de valorar como la gastronomía, el ecoturismo, y otras actividades económicas dinámicas conservando y mejorando los suelos, la biodiversidad, los bosques, y las fuentes de agua. La agroecología es una oportunidad para optar como modelo de fincas agroecológicas, siempre y cuando las inversiones en el agro respeten los ciclos de la naturaleza y se cuente con un plan de reducción de agro tóxicos, de conservación, gestión de territorios integrales y manejo de los ecosistemas.  

 Plataforma Nacional de Reconstrucción de Agricultura Familiar Sostenibles parte del fortalecimiento del espacio de trabajo de la sociedad civil que se había conformado en Abril de este año; cuenta con la participación de más de 30 entidades de la sociedad civil que trabajamos en el ámbito, estos lineamientos se hace desde una perspectiva incluyente, buscando no sólo la incorporación de diferentes perspectivas sobre las temáticas tratadas, sino procurando evitar una duplicación de esfuerzos públicos y promoviendo la generación de sinergias institucionales, mejorando así el impacto de las acciones relacionadas con la agricultura familiar y la economía campesina, como las iniciativas de la sociedad civil y la cooperación internacional han desarrollado análisis y experiencias prácticas que son la base de partida del diálogo y de la construcción conjunta de propuestas.  

 |. - Diagnóstico y Evaluación de Daños

Con la finalidad de hacer más efectivo el proceso de respuesta, rehabilitación y reconstrucción, es necesario contar con un diagnóstico detallado de los impactos y daños ocasionados, donde se incluya lo siguiente:

  1. Los padrones con la relación de las personas afectadas y damnificadas por la emergencia.  Permitirán que se brinde una atención universal, adecuada al tipo de afectación producida, aun cuando no se encuentren en situación de pobreza
  2. Se necesita una estrategia de información y comunicación que genere y permita un ejercicio pleno de ciudadanía, promoviendo comportamientos y entornos protectores para contribuir a eliminar los nuevos riesgos a los que pueden estar expuestos por la emergencia. Para ello la información que se provea debe ser veraz y oportuna, ayudar a formar un juicio informado y tomar decisiones individuales y colectivas ajustadas a las situaciones que se enfrentan. La información debe dar prioridad especial a los grupos afectados a fin de evitar la difusión de noticias inexactas y el aprovechamiento de la situación de emergencia para generar caos y desorden social.
  3. Identificación de Grupos Vulnerables: niñas, niños y adolescentes, madres gestantes, personas con discapacidad, hogares monoparentales y adultos mayores
  4. Determinación del impacto en los medios de vida y otras actividades económicas, especialmente la afectación de tierras de cultivo inundadas
  5. Situación de los servicios públicos afectados: agricultura, agua y saneamiento, energía eléctrica, comunicaciones; así como de la infraestructura dañada: viviendas, escuelas, centros de salud, carreteras, puentes, canales de regadío, etc.  

   II.- Reconstrucción para del Agro Peruano

El escenario de desastres ha evidenciado las grandes debilidades del país en relación a la no presencia de una planificación del territorio y gestión de cuencas de cauces naturales de riachuelos, sea invadido con viviendas, la ocupación de espacios para habilitación urbana, la gestión de ciudades, generado vulnerabilidades y riesgos conocidos por las autoridades peruanas.

Muchas de las áreas arrasadas por inundaciones y desbordes de ríos contaban con títulos de propiedad entregados por el Estado peruano, que durante años ha formalizado la ocupación de tierras agrícolas, no aptas para la construcción de viviendas. El Perú es uno de los países más vulnerable a los efectos del cambio climático y cualquier daño al medioambiente en el país perjudica el equilibrio ecológico. Por tanto, se debe poner en práctica las medidas de mitigación y adaptación en el territorio nacional en diálogo con los países de la región andina como Ecuador y otros países tienen la prioridad mitigación y adaptación al cambio climático.

La agricultura familiar y la economía campesina son parte fundamental de la cotidianeidad y de las formas de vida de la mayoría de zonas rurales de los países en vías de desarrollo. Si bien aún existen muchas discusiones académicas, sociales y culturales sobre su concepto, enfoque y reconocimiento, es indudable el aporte de las familias y comunidades agricultoras a la consecución de la seguridad y soberanía alimentaria, a la cohesión social y a la construcción de territorios seguros y sostenibles.

El sistema de producción, transformación, distribución, comercialización y consumo de bienes y servicios; organizado y gestionado por los hombres, mujeres, familias, y comunidades que conviven en los territorios rurales del país. Este sistema incluye las distintas formas organizativas y los diferentes medios de vida que emplean las familias y comunidades rurales para satisfacer sus necesidades, generar ingresos, y construir territorios; e involucra actividades productivas, sociales, culturales, ambientales, políticas y económicas.

  • La Constitución Peruana reconoce el derecho humano a una alimentación, que permita contar con un marco legal propicio para mejorar la calidad de vida de las poblaciones empobrecidas que viven en precariedad, después desastre de las regiones afectadas.  Requieren una alimentación digna como cualquier ser humano, por tanto, no hay claridad en la orientación de políticas para la agricultura familiar que generan más 70% de la alimentación de los peruanos. A partir de los procesos iniciados por la campaña y la declaratoria de Naciones Unidas, múltiples actores de gobierno, organizaciones sociales y academia han reconocido y fortalecido la importancia de la agricultura familiar, en especial el papel de las mujeres y jóvenes, y han destacado sus interrelaciones con otras actividades económicas, con procesos ambientales, con redes y dinámicas sociales, con mecanismos de gobernanza y con las identidades colectivas en los territorios.
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  • La economía familiar y comunitaria se sustenta en una diversidad de estrategias productivas incluidas la agricultura, la ganadería, la pesca, la acuicultura, la silvicultura, el aprovechamiento de los bienes y servicios de la biodiversidad, el turismo rural, las artesanías y otras actividades de comercio y servicios no vinculadas con la actividad agropecuaria. En este sistema predominan las relaciones de reciprocidad, cooperación y solidaridad, y el desarrollo de sus actividades se fundamenta en el trabajo y mano de obra de tipo familiar y comunitaria. Hoy se necesita recomponer nuevamente esta economía familiar.
  • El proceso de reconstrucción se debe iniciar en el marco de una planificación integral y participativa del territorio. La planificación equitativa, ética, ordenada y centrada en las personas que puede optimizar las economías de las comunidades, promover la densidad sostenible, fomentar la diversidad social y los usos mixtos de la tierra, promover la inclusión y la diversidad para garantizar la igualdad de oportunidades y el acceso a espacios públicos seguros. Se debe avanzar en la construcción de barrios y ciudades compactas más funcionales, democráticas y en un medio ambiente equilibrado, teniendo como eje transversal la prevención de riesgos y la mitigación de desastres.
  • Impulsar una política de producción agroecológica sostenible como proceso alternativo basado en la iniciativa, gestión y control de los/los productores, promoviendo el desarrollo físico y social con apoyo del Estado, favoreciendo el empleo digno y el desarrollo económico.
  • Promueva la resiliencia ecológica de los habitantes y de las ciudades para sobreponerse a las catástrofes. Al mismo tiempo deben atacarse las raíces originarias de los problemas y no sólo preparar a la población para soportar más penurias iniciar gestión de cuencas con la participación de la población organizada, sobre todo las cuencas altas hidrográficas.
  • Promover soluciones innovadoras que ya existen basadas en las comunidades y centradas en la gente para enfrentar las múltiples crisis a las que se enfrenta los agricultores, priorizando la innovación local en atención a las legítimas expectativas de las y los jóvenes de hoy y de las futuras generaciones, emprendimientos económicos de micro empresas.
  • Priorizar una partida presupuestal para los sistemas de producción agroecológica familiar sostenibles, productivos y competitivos. Los sistemas de producción agropecuaria se desarrollarán con base en el incremento del conocimiento, en la innovación, y en la inclusión e integración social y productiva; asegurando un futuro sostenible para un bienestar de la población en los territorios rurales quesería destinados principalmente en:
  1. Implementar una estrategia de extensión rural integral para los productores y comunidades, orientada al desarrollo de capacidades en aspectos tecnológicos, productivos, empresariales, comerciales, organizativos, sociales, ambientales y de participación.
  2. Asesoría y acompañamiento integral a los productores, organizaciones y asociaciones rurales para la generación o fortalecimiento de actividades productivas no agropecuarias que mejoren sus ingresos. crianzas apicultura, pisciculturas, turismo rural el Pago por Servicios Ambientales y el aprovechamiento de los productos de la biodiversidad.
  3. Promover modelos agroecológicos recilientes frente a cambio climático contribuyendo así al mejoramiento de la fertilidad de suelo, agua así a los ecosistemas conducidos por las familias, y como aporte a la prevención y mitigación de los impactos del cambio climático.
  4. Desarrollar tecnologías de riego con fines productivos, en las zonas rurales a partir de la promoción de técnicas de riego y fortalecimiento de soluciones de cosecha, almacenamiento, conservación y reutilización de agua a nivel individual o comunitario
  5. Fortalecimiento de los mercados locales (circuitos cortos de comercialización) de la Agricultura Familiar y asociativa a través del desarrollo de Sistemas Participativos de Garantía como herramientas de las organizaciones agrarias para el reconocimiento y aval de la producción agroecológica y sostenible en sus territorios, articulados a estrategias de fomento al consumo consciente y responsable.
  6. Establecer y fortalecer mecanismos fondo rotatorios de insumos de semillas   que se implementen en los territorios y que estén orientados al fortalecimiento de la agricultura familiar 
  7. Generar o mejorar las infraestructuras productivas de equipos y maquinarias agrícolas, infraestructura de riego, bocatomas, equipos de riegos, centros de acopios de producción, plantas procesadoras de alimentos, a través de los mecanismos de acceso a incentivos y servicios de financiamiento para el desarrollo de las actividades productivas de la agricultura, familiar y comunitaria.
  8. Establecimiento de un programa o estrategia de micro finanzas rurales en cabeza del Agro banco, con énfasis en el ahorro programado con incentivos económicos por parte del Gobierno Nacional. Esta estrategia focalizaría principalmente a los jóvenes y las mujeres rurales.
  9. Construir un Sistema Nacional de Información, el cual será un instrumento de identificación de beneficiarios. Recogerá principalmente información productiva, partiendo del Registro Único de Asistentes Técnicos.
  • Promover el ordenamiento territorial y con enfoque de cuenca, para orientar la reconstrucción bajo una perspectiva de desarrollo seguro y sostenible con la participación activa de la población organizada, en especial de los damnificados.
  • Recuperar la función productiva de la tierra y la propiedad como herramienta para una distribución más equitativa de los beneficios directo de todos los habitantes de la costa afectados por el niño costero.
  • Establezca un nuevo modelo de titulación de propiedades en las zonas rivereñas, por el cual se formaliza suelo en áreas residuales que no presenten riesgos y vulnerabilidades; reemplazarlo por un modelo que promueva el acceso a una producción temporal y masificar la reforestación con plantaciones agro forestales renovación urbana con asistencia técnica, contrarrestando la expulsión de población de escasos recursos.

 III.  Organización, Participación Ciudadana y Fiscalización

  1. Considera la participación de la sociedad civil organizada de manera coordinada con el gobierno nacional y locales a fin de fortalecer su rol y garantizar el liderazgo de las autoridades distritales y provinciales en el proceso, impulsando la participación y el diálogo con la sociedad a través de la conformación de Mesas de Diálogos en las 3 instancias del gobierno  y participación a través de sus representantes en la ejecución de obras, actividades con recursos públicos, alentando el seguimiento concertado  y las auditorias sociales.
  2. Reconocer, valorar y fortalecer las diversas formas de organización de la población y sociedad civil para que apoyen las medidas implementadas por el Gobierno Central, Regional o Local
  3. Definir los procesos de Rendición de Cuentas oportunos de los recursos públicos asignados a la atención de la emergencia, rehabilitación y reconstrucción.
  4. Se debe reconocer el impacto diferenciado que tiene la emergencia entre hombres y mujeres, lo que supone el desarrollo de políticas y líneas de acción que atiendan en esas situaciones desiguales. La forma de abordar la emergencia y los procesos de rehabilitación y reconstrucción no debe ahondar las desigualdades de género y los patrones que están asociados a dichos roles, por el contrario, debe contribuir a una transformación progresiva y dinámica y funcional.
  5. Evaluar los contextos diferenciados existentes: urbano y rural, varones y mujeres, a fin de generar las oportunidades económicas más adecuadas a la realidad de la población afectada, Reconstrucción con enfoque de derecho, con la participación de los protagonistas de la reconstrucción

 

Lima, agosto del 2017